El centro de FP Egibide de Vitoria-Gasteiz, asociado a la Asociación de Centros de Formación Profesional FPEmpresa, ha puesto en marcha durante el curso 2023/24 el proyecto “Peluk-arte”, una iniciativa pionera en Álava que busca capacitar a estudiantes de peluquería y estética para ofrecer una atención integral a personas con alopecia derivada de tratamientos oncológicos. Este proyecto, desarrollado en colaboración con la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) en Álava y la Fundación Vital, permitirá a los futuros profesionales adquirir tanto habilidades técnicas como sociales clave, brindando apoyo a este colectivo desde la empatía y la comprensión.

Formación técnica y emocional

El taller, dirigido a estudiantes del Grado Medio de Peluquería y Cosmética Capilar de Egibide, tiene como objetivo dotarlos de herramientas no solo para el mantenimiento y cuidado de prótesis capilares, sino también para mejorar su capacidad de escucha activa y comunicación con los pacientes. Los estudiantes aprenden a manejar y colocar pelucas y prótesis capilares, así como a utilizar cosméticos específicos que ayudan a preservar la salud capilar y de la piel durante el tratamiento oncológico.

“Para nosotros, es fundamental que los futuros profesionales no solo sepan cómo cuidar una prótesis, sino también cómo acompañar a las personas en este proceso tan difícil. Queremos formar profesionales competentes, pero también compasivos y comprometidos con su entorno”, ha afirmado Sorkunde, una de las responsables del proyecto en Egibide.

El taller se ha desarrollado en varias fases, comenzando con una introducción teórica sobre las necesidades de las personas con cáncer. Posteriormente, psicólogas de la AECC han impartido sesiones para sensibilizar al alumnado acerca del impacto emocional que puede tener la pérdida de cabello en los pacientes. En las últimas fases, los estudiantes han tenido la oportunidad de aplicar los conocimientos adquiridos en casos prácticos, trabajando directamente con personas usuarias de prótesis capilares.

Beneficios para el alumnado y la comunidad

La directora ejecutiva de la Fundación Vital, Ainhoa Pereita, ha destacado la importancia de esta colaboración como una forma de sensibilizar tanto a los futuros profesionales como a la sociedad. “Esta iniciativa es una oportunidad para dotar a los estudiantes de herramientas que no solo mejoren la autoestima de las personas con cáncer, sino que también les permitan desarrollar habilidades sociales imprescindibles para su vida profesional”, ha comentado Pereita.

Por su parte, Sorkunde ha subrayado que la atención centrada en la persona es el eje del proyecto. “No se trata solo de minutos de vida, sino de momentos de calidad que pueden marcar la diferencia en la vida de estas personas”, ha añadido.

“Este trabajo no solo beneficia a los estudiantes al prepararlos para un entorno laboral real, sino que también tiene un impacto directo en la comunidad al mejorar la calidad de vida de personas que están atravesando uno de los momentos más difíciles de su vida”, ha concluido Sorkunde.