El Centro San Viator Sopuerta (Vizcaya), centro asociado a la Asociación de Centros de Formación Profesional FPEmpresa, ha puesto en marcha, junto a la coordinación de la Asociación Mundus, el proyecto SAAM con el fin de promover el intercambio de conocimientos, formación y habilidades entre Europa y África. Esta iniciativa se ha desarrollado desde febrero de 2020 y terminará en mayo de 2024.
El proyecto SAAM es un proyecto piloto subvencionado por la Unión Europea (UE) en el campo de la FP que busca la colaboración con los centros africanos para futuros proyectos Erasmus+, además de mejorar el acceso al mercado laboral de los estudiantes africanos.
“Este intercambio de buenas prácticas y formaciones técnicas del profesorado africano no hubiera sido posible sin la cooperación de 32 organizaciones de ocho países de la UE y diecisiete países africanos”, ha explicado Begoña Inchaurraga, responsable de Relaciones Internacionales en el centro vizcaíno.
Origen y objetivos
“A raíz de la publicación de una convocatoria de proyectos en FP por la Comisión Europea con el continente africano, se presentó SAAM. Finalmente, fue seleccionado como uno de los dos proyectos piloto para el desarrollo de un programa de movilidad en el campo de la FP entre África y Europa”, ha contado Jaione Santurtun del departamento de Relaciones Internacionales del Centro San Viator Sopuerta.
Entre las diversas acciones del proyecto se destaca la primera llegada del alumnado de un centro de Malawi al Centro San Viator. “Nuestro profesorado se ha implicado mucho en darles formaciones útiles y de valor. Esto es demostrable, ya que 10 de los 14 alumnos que habían sido formados en San Viator han sido contratados por una empresa para realizar prácticas”, ha expresado Inchaurraga.
Respecto a los objetivos fundamentales de la iniciativa, el centro de Vizcaya pretende formar y ayudar en la creación de departamentos internacionales en los centros de FP africanos, ayudar en mejorar las habilidades de los estudiantes y del profesorado y realizar un análisis de los sistemas educativos de África, entre otros.
“Nuestro proyecto no solo beneficia al centro, sino también a los jóvenes, ya que les da la oportunidad de adquirir habilidades interculturales. Asimismo, aprenden a adaptarse a otros entornos para mejorar su empleabilidad y emprendimiento y expandir su red de contactos internacionales”, han concluido las responsables del proyecto.