El CPIFP Movera (Zaragoza), centro asociado a la Asociación de Centros de Formación Profesional FPEmpresa, ha liderado durante el curso 2022/23 un proyecto de innovación en agricultura de precisión, diseñado para aplicar nuevas tecnologías en los procesos de cultivo y optimizar el uso de insumos agrícolas. El proyecto ha contado con la participación del Institut Mollerussa y el CI Agroforestal, además de la colaboración de empresas líderes como Agrarium Cinca Medio SLU y Greenfield Technologies SL.
El objetivo principal del proyecto ha sido acercar la FP en agricultura a las necesidades del sector empresarial, impulsando la capacitación de los estudiantes en el uso de tecnologías avanzadas como GPS, GIS y UAVs (drones). Estas herramientas permiten mejorar la eficiencia en la aplicación de insumos y reducir el impacto medioambiental, un enfoque que se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas.
“Este proyecto marca un hito en nuestra oferta educativa, ya que permite a nuestros estudiantes trabajar directamente con las herramientas que las empresas están demandando. La digitalización agrícola no es solo el futuro, es una realidad necesaria para mejorar los márgenes económicos y la sostenibilidad en las explotaciones agrarias”, ha destacado Jorge Alberto Andrés, docente de Formación Profesional de la Familia Agraria en el CPIFP Movera.
Formación en tecnologías avanzadas para la agricultura
La iniciativa también ha permitido fortalecer la formación del profesorado en las nuevas tecnologías aplicadas a la agricultura de precisión. En una primera fase, los docentes de los tres centros participantes han recibido formación en el uso de estas herramientas, de la mano de las empresas colaboradoras Agrarium y Greenfield. Posteriormente, se han elaborado manuales técnicos y diseñado actividades prácticas para que los estudiantes puedan aplicar los conocimientos adquiridos.
El alumnado del Grado Superior en Paisajismo y Medio Rural del CPIFP Movera ha sido el principal beneficiario de esta formación. Durante el proyecto, se han realizado visitas a fincas como Bizcarra, reconocida por su modelo de gestión agrícola basado en datos. Además, los participantes en el proyecto han asistido a jornadas de intercambio con otros centros, lo que les ha permitido adquirir una visión más amplia de las aplicaciones de la digitalización en el sector.
“El déficit de profesionales formados en estas tecnologías es uno de los grandes retos del sector agrícola. Con este proyecto, hemos dado un paso adelante para ofrecer una formación de calidad y actualizada que mejore las oportunidades laborales de nuestros estudiantes, tanto en el autoempleo como en el trabajo por cuenta ajena”, ha concluido Jorge Alberto Andrés.