El Institut Bonanova (Barcelona), centro asociado a la Asociación de Centros de Formación Profesional FPEmpresa, ha puesto en marcha durante el curso 2022/2023 el proyecto ‘Ejercitante cuerpo y mente’ para estimular un ritmo de vida más saludable. Esta idea consiste en crear y poner en práctica actividades físicas, cognitivas y lúdicas, dirigidas a los usuarios de salud mental.

“Sobre todo usuarios de la unidad de subagudos y larga estancia del Centro Fórum del Consorcio Parc de Salut de Barcelona (INAD) y en el ámbito comunitario a los usuarios del centro de Salud Mental de Adultos (CESMA) de la Mina. Debido a la patología y, sobre todo, a efectos secundarios por la medicación que toman son pacientes de alto riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares”, explica Marta Cabré Martín, tutora y profesora del Grado medio de Técnico de Cuidados Auxiliares de Enfermería.

Así, desde el centro se estimula la actividad física y la disminución del sedentarismo junto con la promoción saludables (alimentarios, higiénicos,) que favorecen la reducción de estas enfermedades.

En la iniciativa está implicado el alumnado del Grado Medio de Técnico de Cuidados Auxiliares en Enfermería, además de estar dirigido a estudiantes que acaba la ESO o han intentado acceder a Bachillerato para llegar a Enfermería.

Una forma única de acercarse a la realidad

El proyecto tiene su origen en el curso 2016/2017 y, desde entonces, cada año se vuelve a realizar. Además, desde el INAD se llevan a cabo diferentes proyectos dirigidos a usuarios activos, por lo que “aprovechamos la oportunidad e hicimos la propuesta para trabajar los mismos objetivos más los de aprendizaje del ciclo para plantear este APS”, cuenta Marta Cabré.

“De esta manera, podríamos conseguir los siguientes objetivos planteados: detectar las necesidades relacionadas con la salud física de las personas con enfermedades mentales; favorecer la integración social de estas personas; identificar el estigma y autoestigma que sufren las personas diagnosticadas de enfermedades mentales; y favorece el contacto de los alumnos con el mundo laboral”, enumera la docente.

“Sin duda, supone una gran motivación para el estudiante y un contacto con la futura profesión que van a obtener. Sobre todo, entenderán la actitud que deben de optar a la hora de atender pacientes con estas patologías y adquirirán una madurez importante”, concluye Martín.