La Escuela de Profesionales Alcazarén (Valladolid), centro asociado a la Asociación de Centros de Formación Profesional FPEmpresa, ha realizado el 11 de abril un encuentro con el alumnado de entre 3 y 6 años del CEIP Tierra de Pinares de Mojados para conocer de primera mano la oferta formativa del centro educativo.
La visita, que ha sido organizada y guiada por el alumnado del Ciclo Superior de Educación Infantil de la Escuela de Profesionales Alcazarén, no solo se ha basado en recorrer las instalaciones del centro, sino también en realizar actividades con los pequeños y las pequeñas.
“Este evento no ha podido ser posible sin la ayuda ni gestión de nuestro alumnado de Educación Infantil, un ciclo formativo de Grado Superior en modalidad bilingüe en el que insistimos en una formación 100% práctica, con actividades como esta última”, ha explicado Pino Pérez, jefa de Estudios del centro educativo de Valladolid.
Actividad y objetivos
Este evento ha surgido por la motivación de la Escuela de Profesionales Alcazarén en realizar colaboraciones con centros educativos como parte de su sistema de formación. “Aquí intentamos realizar el número máximo posible de actividades prácticas, así nuestro alumnado puede poner en funcionamiento los conocimientos aprendidos en el aula y que serán muy enriquecedores para su futuro laboral”, ha comentado la jefa de Estudios.
Asimismo, durante el desarrollo de la jornada, los participantes han visitado las aulas de estudio, la cafetería, las zonas comunes y, por último, la cocina donde el alumnado de ambos centros ha elaborado una tarta de chocolate. Además, los estudiantes han llevado a cabo otras manualidades, como la elaboración de delantales de cocina y carteles con todos los nombres de los alumnos y las alumnas.
Respecto a los objetivos de la visita, el centro ha querido impulsar la colaboración con otros centros, el desarrollo de las salidas profesionales de los estudiantes, poner en práctica los contenidos aprendidos y aprender a programar, elaborar y evaluar proyectos relacionados con la infancia.
“Nuestro objetivo va más allá de que los menores aprendan a hacer una tarta. Debemos encargarnos no solo de que adquieran conocimientos, sino también de ayudarlos a desarrollar su autonomía, poner en práctica hábitos de higiene, respeto a los demás e incluso concienciar sobre el reciclaje”, ha concluido Pino Pérez.